El camino de Suecia hacia la OTAN
15 de febrero
Víctor Raúl Aguilar
(c) imagen generada a partir de Microsoft Bing
Ha pasado más de año y medio desde que Suecia lanzó su candidatura a ser miembro de la OTAN; sin embargo, el país todavía está fuera de la alianza. Durante décadas, Suecia mantuvo su postura neutral en medio de las rivalidades entre los bloques políticos liderados por Washington y Moscú. A pesar de las 11 guerras libradas por los suecos con Rusia, principalmente por el control del Mar Báltico, Suecia ha mantenido su neutralidad a lo largo de casi 200 años, limitando sus fuerzas armadas a sus archipiélagos. Sin embargo, esta situación cambió radicalmente tras la invasión rusa a Ucrania el 24 de febrero de 2022.
Aunque el cambio en la neutralidad de Suecia podría vincularse al conflicto ruso-ucraniano, Suecia afirma que su decisión “no es contra Rusia”, sino en virtud de su interés nacional, ya que ser el único país báltico fuera de la OTAN lo dejaría en una posición vulnerable. El comercio y actividad económica podrían explicar el porqué de su decisión: aproximadamente el 30% del comercio exterior de Suecia fluye por el puerto de Gotemburgo. Cerrar este puerto tendría un impacto devastador en la economía de la región, afectando a todos los países nórdicos. Mantener abiertos los archipiélagos y las ensenadas del Mar Báltico es esencial para la estabilidad y el respaldo militar de Suecia. Su adhesión a la OTAN garantiza su estabilidad ante cualquier amenaza en la región.
Por otro lado, la adición de esta extensa costa al territorio bajo la protección de la OTAN le brinda nuevas perspectivas. Desde el Ártico hasta el Atlántico, la OTAN obtendrá bases suecas cruciales para enfrentar a las tropas rusas en Murmansk y la península de Kola. Además, dispondrá de una armada capacitada para operar en aguas poco profundas.
Pero, ¿cómo va su proceso de adhesión a la OTAN? Actualmente ha conseguido el voto favorable de Turquía después de meses de espera; sin embargo, Hungría mantiene sus objeciones sobre la membresía de Suecia en la OTAN. Estocolmo se ha visto envuelto en tensiones políticas con Hungría tras las críticas de autoritario al primer ministro húngaro. Este sería el motivo, aparente, detrás de la objeción del país húngaro.
Aun así, para Suecia su adhesión es una victoria anunciada. Recientemente ha firmado un acuerdo de cooperación en defensa con los Estados Unidos y viene promoviendo esfuerzos y tratos para superar la marca de gasto militar superior al 2% del PIB acordada por los países de la OTAN. Estos esfuerzos y premonición de victoria vienen precedidos por una rápida aceptación política y el apoyo de la opinión pública tras el inicio del conflicto ruso-ucraniano. Hoy, más que nunca, Suecia ha dejado atrás su papel neutral y emprendido una campaña diplomática, militar y política que la ha situado a pocos pasos de ser miembro de la alianza.